El Salvador: Protegiendo a los niños: Hacia un programa coordinado de seguridad alimentaria y nutricional para El Salvador

Un rápido descenso en las remesas y un incremento en el precio de los alimentos y combustibles ha disparado los niveles de pobreza y malnutrición en El Salvador, donde en 2008 la pobreza extrema se elevó un 6,5% y el 87% de los hogares pobres redujeron los niveles de consumo de alimentos.

Por todo ello, los progresos importantes de El Salvador hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio en áreas como la reducción del hambre y la pobreza (ODM1) y la mejora de las tasas de mortalidad infantil (ODM 4) se han visto seriamente amenazados.

El programa conjunto apoyó los esfuerzos de las autoridades para construir el consenso y fortalecer la capacidad de tutela del estado para establecer propuestas integradas para aliviar el hambre, la malnutrición y la inseguridad alimentaria infantil.

A nivel nacional apoyó y promocionó la implementación de una visión integral para atender a las problemáticas de la seguridad alimentaria y nutricional. Para ello apoyó técnica y financieramente a la entidad nacional coordinadora de las políticas de nacionales de seguridad alimentaria que es el CONASAN, la cual ha sido consolidada e impulsada a través del programa.

En la actualidad tiene un rol esencial en la coordinación interinstitucional nacional y su estructura y personal apoyado inicialmente por el programa ha sido absorbido por el presupuesto nacional. Gracias al fortalecimiento de esta institución, se pudieron llevar a cabo tareas tan importantes como el proceso de elaboración de la Ley de Soberanía y Seguridad Alimentaria Nutricional.

A nivel local, se trabajó con los municipios y las comunidades para promocionar la creación de estructuras de gobernanza que faciliten el ejercicio de los derechos, y el diálogo institucional. Estas estructuras culminaron en la incorporación de la seguridad alimentaria y nutricional en las políticas de desarrollo local, y en la creación de comités locales específicos.

Por otro lado, también se atendió a las necesidades más urgentes, a través de la mejora de la productividad agrícola, el incremento del acceso a los alimentos y diversificación de la dieta para las poblaciones más vulnerables, y la intervención a nivel de educación, de la salud y del empoderamiento de la mujer.

Algunos de los resultados del programa fueron:

• Fortalecimiento del marco legal, por medio del apoyo en la revisión del ante proyecto de Ley de Soberanía y Seguridad Alimentaria Nutricional, que incluyó una gama de determinantes que afectan la seguridad alimentaria y nutricional (SAN), permitió una amplia participación de las distintas instituciones nacionales ligadas a la SAN, y el involucramiento del Sistema de Naciones Unidas en su revisión, con un trabajo destacable de la Alianza Panamericana por la Nutrición y el Desarrollo.
• Fortalecimiento de la CONASAN y el equipo técnico COTSAN, en el funcionamiento de sus propias oficinas, formulación de planes estratégicos, operativos y definición de una estrategia para la coordinación interinstitucional. El equipo COTSAN recibió formación a través del Diplomado Seguridad Alimentaria.
• Fortalecimiento de los Comités Municipales Intersectoriales para gestionar la línea de actuación de seguridad alimentaria de los planes de desarrollo local, incremento de la disponibilidad, diversidad de alimentos y los ingresos económicos de 462 familias y trabajo con centros de salud y educación de tres municipios para abordar los determinantes socio económicos y ambientales de la desnutrición infantil y promover el empoderamiento de mujeres, la participación de los hombres, familias y comunidades.

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