Haiti: Prevención de conflictos y cohesión social a través del empoderamiento comunitario local y el fortalecimiento de capacidades institucionales
Haití, el país más pobre de América, ya tenía uno de los mayores niveles de violencia y desempleo juvenil del mundo antes del devastador terremoto que en el año 2010 dejó más de 200.000 muertos y un millón y medio de desplazados así como la destrucción de infraestructuras vitales.
A través de un firme acuerdo de colaboración entre cinco organismos de las Naciones Unidas y la Misión de Mantenimiento de la Paz de las Naciones Unidas, el programa conjunto abordó las causas inmediatas de la violencia en 10 comunidades especialmente propensas a la violencia en Haití a través del respaldo de estrategias de prevención de la violencia, ofreciendo así un intervalo de tranquilidad para que arraiguen la recuperación a largo plazo y los esfuerzos de desarrollo.
Para respaldar estos esfuerzos a nivel local y asegurar una respuesta sostenible e integral a la violencia en Haití, el programa también promovió una integración más sistemática de los factores relacionados con la violencia y la crisis dentro de las políticas de desarrollo y otras respuestas del gobierno nacional.
Se ha conseguido mediante el refuerzo de las capacidades de las instituciones locales y nacionales para reunir y analizar datos relacionados con la violencia y la crisis, con el objetivo de producir y compartir un análisis creíble para mejorar el efecto de los programas y las políticas sobre la dinámica de la violencia, incluso desde el Gobierno nacional.