Cultura y Desarrollo

Erradicar la pobreza extrema y el hambre

El respeto a la diversidad cultural promueve el desarrollo de sociedades dinámicas e integradoras.

Ha quedado demostrado que el fortalecimiento de las industrias creativas y la protección del patrimonio natural y cultural son instrumentos efectivos de desarrollo económico. Nuestra labor ha aprovechado el potencial del sector creativo para la creación de empleo, el crecimiento económico y la reducción de la pobreza, y apoyado los esfuerzos por promover la inclusión de las minorías en la vida social, política y cultural. Hemos trabajado extensamente con las comunidades indígenas a la hora de proteger su patrimonio cultural y construir servicios educativos y de salud coherentes con sus cosmovisiones. 

Nuestros 18 programas en esta área han tenido como eje los derechos culturales, la inclusión social, el impulso del patrimonio cultural y el potencial turístico de los países con el objetivo de reducir la pobreza, aumentar el empleo y mejorar las oportunidades socioeconómicas para los segmentos marginados de la población. En particular, nuestra labor subrayó la participación de las mujeres, además de trabajar con colectivos indígenas y étnicos, y gobiernos, para mejorar el entendimiento intercultural dentro de los países.    

En Camboya se prestó formación a mujeres dedicadas a la artesanía, algo que, no sólo contribuyó a que aumentaran sus ingresos, sino que realzó también su papel en el hogar y la comunidad. Esto provocó una reducción de los índices de violencia de género y expandió las capacidades de las mujeres para gestionar las finanzas domésticas y hablar sobre asuntos considerados tabú. En Senegal, el programa trabajó para incluir dos enclaves de importancia cultural en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Asimismo, los pescadores del delta del Saloum triplicaron sus capturas mensuales y aumentaron enormemente sus ingresos gracias al uso de mejores técnicas de gestión de los recursos. Utilizando estrategias respetuosas con el entorno cultural en materia de servicios de salud materno-infantil en el seno de las minorías étnicas de China, el programa logró aumentar en un tercio la tasa de partos en hospital y en un 21 por ciento la cobertura general de servicios de salud prenatales.

Estos esfuerzos contribuyeron al ODM de reducir a la mitad la proporción de personas con ingresos diarios menores a US$ 1,25 y al resto de ODM relacionados con el empoderamiento de las mujeres, la salud, la educación y la sostenibilidad ambiental.